Protagonista
absoluto del arte de hoy, Gerhard Richter es uno de los artistas top del
mundo, su prolífica carrera es un recorrido artístico que va desde mediados del
siglo XX hasta hoy. Cuando consultamos a
curadores, críticos y expertos, su nombre siempre aparece como referente del arte del siglo XXI.
La obra del alemán Richter no se clasifica en el ranking de
los más costosos, ni entre los más populares, sus obras no son objeto de culto de estrellas de cine o fashionistas, se trata de un artista consagrado, que ha
explorado técnicas y materiales, que ha evolucionado con el mundo, y que definitivamente
dejará una huella en la historia del arte.
Realizó pinturas que fundían la
iconografía periodística y retratos de familia, con un realismo austero basado
en la fotografía. En su primera exposición de Düsseldorf, en 1963, el artista
presentó por vez primera un estilo de fotografía-pintura, donde expresa la
posibilidad de la fotografía de congelar el instante en que ocurre la escena, y
la posibilidad de la pintura foto realista de reinterpretar ese instante
congelado… Fantástico.
A inicios de la década de los años setenta, evolucionó para
una pintura monocromática sobria que evocaba la corriente minimalista; luego comenzó su fase «constructivista» con Color Charts, Inpaitings, así como un trabajo con espejos . A
principios de los ochenta, sus pinturas sobre lienzo de
colores brillantes y atrevidamente delineados sugerían un toque expresionista, marcando una nueva tendencia.
La producción artística de Gerhard Richter puede clasificarse en tres categorías: figurativa, esto
es, todas las pinturas se basan en la fotografía o la naturaleza; constructivista, trabajo más teórico como tablas de color, paneles de vidrio y espejos; y abstracta, casi todo el trabajo realizado desde los 80s.
.
Con homenajes y retrospectivas desde la década de los 80, su trabajo ha sido expuesto con bombos y platillos en el MoMA de Nueva York, en el Albertina de Viena, en la Haus der Kunst de Münich, en el Tate Modern de Londres, en la National galerie de Berlin y en el Centre Georges Pompidou de Paris entre muchos otros museos del mundo
Para su última retrospectiva El periódico Guardian de
Londres, lo catalogó como el “Picasso del siglo XXI”
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